El Faro de Bell Rock se encuentra en el Mar del Norte, a 18 kilómetros de la costa de Esocia, y es el más antiguo de los faros que, construidos mar adentro, aún resisten.
Debido las mareas y al mal tiempo su construcción fue larga y difícil. La roca sobre la que se asienta llevaba siglos constituyendo un peligro para la navegación. Los costes y las dificultades de construir un faro en una roca habían aparcado el proyecto, que no se rescató hasta que el barco de guerra HMS York naufragó a causa de la roca en 1804 perdiendo la vida toda su tripulación, 491 personas. Esto convenció de la necesidad urgente de empezar a construir el faro, que por aquella época se estima que se cobraba unos seis naufragios anuales.
La tarea fue muy larga (4 años), sobre todo al principio, cuando sólo se podía trabajar 2 horas diarias, media de las cuales se perdía en evacuar el agua, y otro tanto tiempo en transportar a los trabajadores desde la costa. Una vez el proyecto avanzó, se construyó una caseta para evitar los continuos traslados y unos raíles para mover las rocas, la situación mejoró notablemente.
El 1 de Febrero de 1911, al fin, se encendió por primera vez el Bell's Rock Lighthouse, ningún barco a vuelto a naufragar desde entonces, y allí permanece, aguantando, impávido, los embiestes del mar, las mareas, las tormentas y el mal tiempo. Se considera una obra maestra de Ingeniería del siglo XIX, casi 200 años en pie así lo avalan.
Fuente | Cabovolo
